Siempre pensamos que algún día llegará el momento perfecto para empezar, como si de pronto desaparecieran las dudas, el miedo o las excusas
Pero la vida no funciona así, no espera a que tengamos todo claro, a veces el único modo de avanzar es arriesgarse, aunque duela, aunque cueste
Esta frase lo recuerda con sencillez:
“Nunca llega el momento perfecto para empezar, siempre habrá dudas, miedos o excusas. Aun así, avanzar significa atreverse, aunque te duela, aunque cueste.”
El camino nunca se dibuja entero antes de dar el paso, primero se anda, después se revela, y en ese movimiento aparece la claridad que desde la quietud parecía imposible
Y ahora, antes de seguir, piensa
Si hoy dieras el primer paso hacia eso que te ilusiona, ¿qué crees que ocurriría de verdad?
Puede ser algo pequeño, una llamada, una decisión postergada, una idea que guardas en silencio, lo importante no es la magnitud, es la honestidad con la que eliges moverte
Escríbelo si te ayuda, guárdalo si lo necesitas, compártelo si lo sientes, no para los demás, sino para ti, para escucharte, para no olvidarte
